Marah

Me dejó impresionado el bolo de Marah (en la foto, los Bielanko brothers) . No les había visto nunca, tenía sus discos y estaba acostumbrado a leer ese comentario unánime que habla de lo bueno que son en vivo, que insiste en su intensidad sobre las tablas.
No se quedaba corto. ¡Menuda banda de directo!
Ahora mismo no me viene a la cabeza ningun grupo capaz de entregarse a ese nivel, de comulgar con la electricidad como ellos lo hacen.
Era como ver a Springsteen con los Replacements, a los Faces mezclados con los Del-Fuegos. Sin parar, temazo tras temazo.
Marah son un grupo modélico. Hacen muy buenas canciones, buscan el combate -en el mejor sentido- con el público y te dejan con muchas ganas de más. Te consuelas volviendo a sus discos y descubres, de nuevo, que casi se puede hablar de dos grupos, los Marah de estudio y los de directo. Aquí la fuerza bruta, el rock en estado puro. En los discos, sin embargo, hay espacio para las cosas bonitas, los arreglos, los medios tiempos.
De lo mejorcito que rula por ahí ahora mismo. Marah son la puta bomba.
Por cierto, la telonera fue Gina Villalobos, que además cumplía años.