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Lugar: donostia

27 febrero, 2006

Nuevo single de Neal Casal


Buenísimo el nuevo single de Neal Casal, un sorpresón. No porque sea bueno, pues era algo que me esperaba y relativamente fácil de prever vista su trayectoria, sino por el tipo de canción elegida y lo que supone de ruptura con lo anterior.

"You don't see me crying" (7"Fargo FA4501) es un temazo pop superlativo, un espectacular medio tiempo que cuelga de un órgano deudor del que Al Kooper pilotara en "Like a Rolling Stone" para expandirse poco a poco hasta convertirse en una canción total. Ni rastro de roots, nada de ese country-rock amable que durante años ha sido marca de la casa. Ahora Casal se muestra claramente como lo que es, el legítimo heredero de Jackson Browne, Warren Zevon y tantos otros exponentes del arte de cantautor. Alejado del estilo outlaw, tan vehemente y puramente rockero, y tampoco cómodo en el segmento más afectado y tristón del sonido americana, sus discos han estado siempre en medio de ninguna parte, dispuestos a ser adorados por quienes menos se fían de las propuestas de moda y más se dejan llevar por el correcto digerir de las referencias clásicas. Por eso, creo yo, a pesar de ser más conocido que muchos otros, nunca ha terminado de cuajar. Y mira que tiene temazos ("Willow jane", "Reason", "Eddy & Diamonds", "Free to go"...) y discazos. Y una voz cálida de flipar.

En fin, que me gusta mucho Neal Casal. Me gusta como compone, como canta y como toca la guitarra. Y además me cae bien. Y me jode un huevo que haya venido hace un par de semanas a tocar a España y se haya pasado de él a saco. Que en el bolo de Barcelona, por ejemplo, apenas asistieran 100 personas, seguro que muchas con invitación, no tiene perdón de dios. En fin. Parece que en mayo regresa, esta vez con banda, y ojalá vaya mejor la cosa.

"You don't see me crying" está disponible en cd-single, creo, pero lo importante es que Fargo ha editado la referencia en vinilo, en un precioso 7" que se ha convertido ipso facto en mi sencillo favorito de los últimos días. En abril sale el nuevo disco: seguro que mi dealer (www.hankypankyrecords.com) me lo consigue el primer día en que esté disponible. También os recomiendo que tratéis de investigar en su menos conocida faceta de fotógrafo. En su nueva web, aún en construcción, parece que va a colgar cosas. Tuve ocasión de ver algunas instantáneas en su página antigua y los resultados eran sorprendentes.





3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Te veo en plan muy tranqui, Edu. Casal me gusta, pero no le he llegado a ver en directo.
Para cuándo un análisis sobre el nuevo trabajo de Biscuit? Y de Green Manalishi?
Y que continue el alt-country, por favor.

10:45 a. m.  
Blogger psychedu said...

Es lo que toca ahora, normalmente son los biorritmos los que marcan el tipo de música que escucho por placer, y que viene a ser la que no escucho por obligación. En este último apartado me tengo que tragar cada jena que ríete tú de las de davismiles. Un blog de jena-rock, eso sí que rompería.

Sí, estoy tranqui. Hace tres años o así me tiré meses escuchando hard-rock 70s. Pero a partir de ahí he vuelto a la melodía, y al country-rock. Barrunto un aterrizaje inminente en la new-wave y el 60s inglés, que es lo que históricamente más me ha gustado.

Lo de Green Manalishi es muy bueno. Trillado, pero muy bueno, el mejor disco español del año pasado tras el de Lapido, en mi opinión. Lo de Biscuit aún no lo he escuchado. Sí me pasaron avances del disco, premezclas y tal, pero el producto definitivo aún no lo tengo. Te adelanto que va a patear culos, y que hay que tenerlo. Es muy superior al anterior, que ya conoces.

Ahora que lo pienso, igual dedico una entrada al universo Biscuit. Eso sí, aviso que el texto rozará la homosexualidad: A pesar de que sean viejos, feos y gordos, les quiero demasido. Mmmm, igual es porque me siento identificado...

12:45 p. m.  
Blogger Biscuit said...

Ahí te quiero ver, queremos entrevista en profundidad al Dr. Biscuit.
Y, efectivamente, lo de la voz del Casal es algo superior, un super-clase... a lo Messi.

4:06 p. m.  

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